Conducir por una carretera en un día despejado y soleado es muy diferente a conducir bajo una lluvia tormentosa con vientos fuertes. De hecho, muchos propietarios de coches se sienten ansiosos por tener que salir durante ese clima.
Esta también es una buena opción si crees que tu automóvil y tus habilidades de conducción pueden verse comprometidos o en peligro por una situación como esta. en esos casos, es aconsejable no usar el vehículo.
Pero, ¿qué pasa cuando es inevitable salir de casa bajo la lluvia, con menos visibilidad y tener que afrontar baches desconocidos?
Ahí es cuando estos consejos de seguridad para el clima lluvioso son útiles. Debes saber qué precauciones puedes tomar para que tu conducción sea lo más segura posible y que tu coche también esté bien.
Por mucho que nos gustaría creerlo, conducir bajo la lluvia no es como se muestra en las películas con música suave de fondo. Por lo general, puede ser una experiencia estresante, con sonidos estridentes de bocina, atascos de tráfico y un grupo de conductores ansioso.
Por eso, si tienes prisa por llegar a algún lugar porque saliste tarde, una carretera mojada se convierte en un desastre potencial. A esto añádele algo de niebla a la ecuación y los riesgos se triplicarán, sin requerir que nadie ni nada más se involucre.
Conducir bien en carreteras mojadas o con niebla, o en cualquier condición que no sea perfecta, se trata principalmente de saber estar: Paciencia, concentración, coordinar los ojos y el cerebro y, como siempre, tener suficiente espacio para operar.
Es importante seguir los consejos que te dejamos a continuación para que puedas conducir con precaución y evitar accidentes.
Te traemos estos 10 consejos, más un extra, que puedes aplicar para evitar accidentes y protegerte a ti, a tus acompañantes y a tu coche. Estos son de especial valor si acabas de obtener tu permiso b.
Esto es todo lo que necesitas hacer para garantizar la seguridad durante un viaje por carretera bajo la lluvia:
La buena visión es clave para una conducción segura, es por ello que es crucial revisar todas las luces. Encenderlas mientras conduces bajo la lluvia no solo te ayuda a una correcta circulación y aumenta la visibilidad. Además, ayuda a otros conductores a ver tu automóvil en la carretera y evitar cualquier percance.
Es aconsejable que lleves las luces cortas porque estás permiten ver lo que tienes más próximo mejor. Las luces largas en realidad alumbran a más distancia (algo innecesario en caso de tormenta) pero ofrecen un grado de nitidez inferior.
Cuando las condiciones climáticas se vuelven complicadas es posible que la visibilidad se dificulte y todo esté borroso, brumoso o con niebla. En estos casos, lo que puedes hacer es guiarte por medio del coche que tengas delante y seguirlo gracias a las luces.
Eso sí, debes mantener una distancia segura para evitar colisiones o accidentes.
El sistema de frenos antibloqueo funciona muy bien para controlar el vehículo y hacer frente a deslizamientos de forma segura.
Pero siempre es una buena idea tomar precauciones. Recuerda que tus frenos no serán tan eficientes como lo son en condiciones climáticas y circunstancias normales.
Es de mucha importancia asegurarse de que tu automóvil esté en perfectas condiciones antes de salir bajo un clima lluvioso. La suspensión y los neumáticos son muy necesarios para mantener la estabilidad del coche, así que es indispensable su constante revisión.
Los neumáticos pasan por mucha fricción y desgaste, por lo que la carretera mojada reduce su agarre y puede provocar la pérdida de control.
Conduce con mucha atención y evita los charcos en la medida de lo posible.
Si está dentro de tus posibilidades, lo mejor es que evites pasar sobre las líneas blancas de la carretera. Recuerda que por la humedad, el coche puede perder adherencia en los neumáticos al pisar estas líneas.
Cuando se está conduciendo bajo condiciones climáticas adversas, es importante no hacer movimientos bruscos que puedan ocasionar accidentes.
Por lo tanto, evita frenar de forma brusca, porque tu coche puede terminar patinando en la carretera o producir una colisión con otros vehículos.
Bajo un aguacero fuerte pueden crearse charcos y agua estancada. No se recomienda conducir a través de ellos hasta que sea absolutamente necesario, ya que puede ocurrir el aquaplaning. El aquaplaning ocurre cuando el coche pierde tracción y se desliza por la superficie del asfalto.
Lo más recomendable es mantenerse alejado del agua estancada. Si es inevitable y esto sucede, lo que debes hacer es soltar el acelerador con calma y dirigirte en la dirección en la que debe ir la parte delantera del automóvil. Asegúrate de no intentar presionar los frenos de manera agresiva ni hacer giros repentinos.
Tómate tu tiempo cuando conduzcas bajo la lluvia y acelera con suavidad. Cumple con el límite de velocidad y trata de conducir incluso más lento de lo habitual.
Es normal que los cristales se empañen cuando llueve. En estos casos, un limpiaparabrisas funcional es tu mejor apoyo para conducir en estas circunstancias. Asegúrate de que esté en buenas condiciones.
Es importante que le des a otros vehículos (y a ti mismo) suficiente espacio y evitar una colisión. Ten en cuenta que el tiempo de frenado es superior y que es más probable que también reacciones más tarde por falta de visibilidad.
Conduce a una velocidad lenta para evitar que tu vehículo pierda tracción y patine. Esto garantizará seguridad para ti y los otros conductores.
Conducir con estas condiciones climáticas es muy difícil para cualquiera. Debes mantener la calma para tomar decisiones acertadas que garanticen tu seguridad y la de los demás.
Mantén la vista en la carretera y presta atención a los alrededores para detectar cualquier peligro potencial. Es vital que tus sentidos estén alerta y que no te dejes llevar por sentimientos de pánico que puedan jugar en tu contra.
Ahora que conoces los consejos para conducir un coche con lluvia, te dejamos nuestras recomendaciones si conduces una moto.
Es importante que puedas ver lo mejor posible. Igualmente, debes poder ser visto por los otros conductores para evitar una colisión. Recomendamos encender las luces y utilizar ropa con cintas reflectantes amarillas, chalecos reflectantes u otras prendas que resalten.
Mantén una distancia segura con otros coches o motocicletas. Esto evita posibles choques o accidentes por colisión. Al igual que con un coche, el tiempo de frenado es superior.
Si por la carretera que estás circulando hay curvas o debes realizar algún tipo de giro, debes hacerlo con cuidado, porque la tracción de los neumáticos es inferior y la motocicleta puede patinar.
Al igual que el punto anterior, hay que resaltar la importancia de ir lento y recto. Nada de inclinar la moto en ángulos muy pronunciados, porque se puede perder el control.
Con el suelo mojado, las calles y carreteras se vuelven muy resbaladizas. Debes conducir con cuidado y prestar atención.
Debes estar pendiente de posibles obstáculos en el suelo que pueden ser muy peligrosos, ya que pueden hacer que los neumáticos patinen y se produzca un accidente. Fíjate que en tu camino no haya alcantarillas, líneas blancas en el suelo, rejillas, etc.
Es importante frenar con tiempo suficiente, ya que la moto va a tardar más en hacerlo cuando el suelo está mojado. Por eso, también es importante mantener una distancia prudencial de otros vehículos.
Debido a la poca adherencia y tracción de los neumáticos, es necesario mantenerse recto para tener el mayor agarre posible y evitar que la moto patine sobre el asfalto.